La agonía de lo macabro...
- Título original: Stric
- Director: David Kapac, Andrija Mardesic
- Guión: David Kapac, Andrija Mardesic
- País: Serbia Año: 2022 Duración: 104 min.
- Música: Miro Manojlovic Fotografía: Milos Jacimovic
- Compañía: Eclectica, SENSE Production
- Intérpretes: Goran Bogdan, Miki Manojlovic, Ivana Roscic, Roko Sikavica, Kaja Sismanovic
- Género: Thriller
Sinopsis
La historia se desarrolla en las afueras de la antigua Yugoslavia, donde en una acogedora casita de campo una familia se apresura a hacer los últimos preparativos para la cena de Nochebuena. El invitado que está por llegar es su querido tío, el cual viene desde Alemania para celebrarlo con ellos, y al que al parecer le gusta que esté todo en su correcta disposición...
Eclectica
Esta es una de esas películas en las que solamente viendo el tráiler o el poster ya genera cierta curiosidad por ver qué se cuece en su interior. Acertadas eran las sinopsis que la descifraban como un híbrido entre el cine de Lanthimos y Haneke, ya que más de unos encontrará reminiscencia a alguno de sus trabajos. Aún así, esta primera incursión en el largometraje por parte de sus realizadores tiene identidad propia, dejándonos una pausada pero macabra película para disfrute o agonía del espectador...
Y es que rozando la comedia, la historia comienza con una familia yugoslava algo atípica en la década de los ochenta, donde todo lo que les rodea desprende olor a caduco, por evitar llamarlo vintage. El estrés que desde sus inicios desprenden las acciones de sus personajes principales ya nos mantiene inquietos por saber qué les pasa o qué está sucediendo, cambiando nuestro parecer de una sonrisa graciosilla a algo más nerviosa con el paso de los minutos. A medida que avanza su desarrollo, ese tono irá cambiando hacia un color más oscuro, llevándonos a un terreno mucho más pantanoso y macabro en el que nos desvelará todos los secretos que escondía.
Una película peculiar pero a su vez atractiva, en la que si se entra desde los minutos iniciales al juego que nos propone es muy disfrutable (o sufrible). Los actores plasman sus papeles a la perfección, y es algo que a priori parece complicado por la complejidad de su guion, pero que solventan con creces ofreciendo al espectador unas interpretaciones que van desde el aparente ridículo a la desesperación. Se alzó con el premio a la mejor dirección dentro de la sección de Nuevas Visiones en el pasado Festival de Sitges, y es que no es para menos. Muy recomendable para amantes de esta sección.
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