Meg 2: The Trench

Un Asylum vitaminado a lo grande...

• Título traducido: Megalodón 2: La fosa
• Director: Ben Wheatley
• Guión: Dean Georgaris, Erich Hoeber, Jon Hoeber
• País: Estados Unidos Año: 2023 Duración: 116 min.
• Música: Harry Gregson-Williams  Fotografía: Haris Zambarloukos
• Compañía: Apelles Entertainment, China Media Capital, Flagship Entertainment Group, Gravity Pictures, Maeday Productions
• Intérpretes: Jason Statham, Sienna Guillory, Cliff Curtis, Skyler Samuels, Sergio Peris-Mencheta, Page Kennedy, Wu Jing Shuya, Sophia Cai, Melissanthi Mahut, Whoopie Van Raam, Ron Smoorenburg, Kenneth Won, Able Wanamakok
• Género: Acción, Terror

Sinopsis
El equipo del Mana One emprende una nueva misión para explorar la fosa abisal encontrada hace años y así descubrir nuevos avances para la ciencia. Pero al parecer no son los únicos que tienen interés en lo que pueda esconder, y tendrán que lidiar con ellos y con las bestias prehistóricas que puedan encontrarse allí abajo...

Warner Bros.

Siguiendo con la trama de la anterior entrega e incorporando algún componente más en el equipo protagonista, volvemos a visitar la fosa abisal que se descubrió en aquella y con la que pudimos descubrir la existencia de la bestia que le da nombre a la película. Dentro de los parámetros en los que se movía tuvo muy buena aceptación por parte de los espectadores, así que los involucrados económicamente no se lo pensaron dos veces y nos ofrecen una nueva embestida de este escualo prehistórico. Y teniendo en cuenta que la saga literaria en la que se basa tiene siete u ocho entregas, esperemos que nos den aventuras submarinas durante un buen rato...

Estaba claro que había que renovarse para no caer en un estiramiento fácil del chicle, así que por qué no dejar un poquito de lado a la bestia e incorporamos algunas cositas nuevas que la hagan muchísimo más entretenida. Para empezar, le damos otro sentido a la vida del personaje de Statham, siendo un activista verde y sacándole más partido a lo que mejor sabe hacer: repartir leña. Esto lo conseguimos gracias a la existencia de unos nuevos malotes que querrán sacar partido económico de esa fosa descubierta con la extracción de minerales preciosos de la misma. Por supuesto, la coexistencia es imposible y los rifirafes serán una constante en toda la película, que sumado a la neutralidad de las bestias prehistóricas, las cuales no tienen bandera y atacarán a lo que se les ponga por delante, la diversión se multiplica.

Explicado así, parece una de esas producciones inverosímiles que productoras como Asylum suelen realizar, con mezcla de elementos prácticamente aleatorios y sin sentido, pero que tienen su propia legión de seguidores incondicionales. Y así es. Es prácticamente lo mismo, pero inflada con un presupuesto en condiciones para poder hacer las cosas bien, refiriéndome por supuesto (salvando las distancias) a lo que podría ser más determinante, como el apartado del CGI o los set pieces utilizados, donde se nota una mayor calidad, incluyendo también como no al elenco de actores ya conocidos. Todo ello para crear, sin ningún tipo de duda, la película palomitera por excelencia de este verano.

Un encargo que aceptó realizar el director anglosajón Ben Wheatley, que para quien no conozca su obra previa, está muy lejos de su línea autoral, quizá mucho menos accesible para el espectador eventual. Pero como hay que comer en esta vida aceptó el trabajo, y la verdad, ha sido un gran acierto y un lujo tenerle a los mandos. No ha de ser nada fácil mezclar tantos elementos y salir airoso del intento, pero es que además, nos deja muchas perlas que solamente pueden ocurrírsele a alguien con su calidad tras las cámaras. La mezcla de comedia, acción, salvajadas, y locuras imposibles, nos traerán a la memoria reminiscencias a otras producciones como la saga Fast and Furious o los exploits de Tiburón (Steven Spielberg, 1975), que sumado a un aumento sustancial respecto a la primera en las escenas más carnívoras, se vuelve en un maravilloso festival de género de serie B.

En definitiva, un gran acierto volver así a las profundidades con esta nueva entrega. No hay que tomársela más en serio que para disfrutar de ella de principio a fin, sin ataduras de ningún tipo ni buscar semejanzas con cualquier otra realidad, solamente divertirse y punto.