Zinemaldi 2018 ~ Día 7

Recta final para esta edición y parece que la organización del Festival ha ido dejando los mejores platos para el postre. Se han visto muy buenas películas durante esta semana, pero la jornada de ayer, aún habiendo programado solamente tres títulos en nuestra agenda, fue realmente exquisita. Destacar principalmente la buena cosecha de títulos que nos llegan desde el mercado sudamericano y que seguramente tendrán repercusión más allá del horizonte latino, deseando lo mejor para sus realizadores.

El primer turno de la jornada le pertenecía a la película vietmanita The third wife, primer largometraje de su directora Ash Mayfair que se proyectaba dentro de la sección Nuevos directores.

Recientemente premiada en el Festival de Toronto como mejor película asiática, ésta nos sitúa en pleno siglo XIX donde un noble vietnamita va a casarse por tercera vez. La película nos presenta a través de los ojos de la joven prometida cómo se definían y elegían las clases preferentes dentro del machista y dictatorial señorío feudal. Pero más allá del mensaje y del contexto histórico, la película tiene un desarrollo demasiado lento como para aguantar el atractivo hasta el final. Los primeros minutos y sobretodo las interpretaciones son magníficos, pero le falta algo más para llegar a la redondez.

La siguiente película formaba parte de la sección Perlas y venía precedida por la polémica que surgió en el pasado Festival de Cannes debido a ser una producción de Netflix, se trataba de Roma, del siempre sorprendente Alfonso Cuarón.

Más allá del debate sobre la televisión bajo demanda, hay que decir que esta película es realmente una pieza artística del séptimo arte. Cuarón expresa con ella sus sentimientos hacia una infancia difícil en la que idolatra a la nana que cuidó de ellos durante las complicaciones que sufrieron, aún perteneciendo a una familia acomodada. Dentro del contexto previo a la fatal dictadura que asoló a Mexico a finales de los setenta, desarrolla su particular historia dejando como trasfondo los momentos clave que se sucedieron. Quizá la historia no sea igual de atractiva para todos los espectadores, pero hay que decir que técnicamente es una obra maestra. Desde el blanco y negro utilizado, pasando por todo tipo de travellings imposibles a los que el director nos tiene acostumbrados y sobretodo por su magnífica fotografía. Una película que tras su visionado ya sabes que va a llegar mucho más lejos de lo que seguramente se espera de ella. Bravo.

Y para terminar la jornada una producción argentina que va más allá de un simple biopic, El Ángel de Luís Ortega.

Basándose en la historia del delicuente más joven del país condenado a cadena perpetua, Carlos Robledo Puch, la película nos relata el periodo de tiempo en el que cometió sus peores delitos y por los que acabó entre rejas. En un tono de humor negro aunque sin ser demasiado irreverente, el desarrollo que nos hace del personaje así como la interpretación que Lorenzo Ferro realiza son sensacionales. A medida que avanza el metraje irá cogiendo un tono más y más serio (o más bien criminal) hasta que el ya conocido desenlace da por rematada la obra. Gran apuesta del cine argentino que parece tener todas las papeletas para ser la candidata a mejor película del año.