Zinemaldi 2018 ~ Día 6

Aún siendo eclipsada por la presencia de Robert Pattinson y la legión de seguidoras y seguidores que hicieron guardia para poder verle, la verdad es que la jornada de ayer fue una de las más atractivas en lo que a contenido se refiere. La selección de películas que hicimos en nuestra particular agenda nos hizo volver a casa con la cabeza repleta de momentos para ir digiriendo poco a poco todo lo visto y así poder sacar conclusiones en esta recta final.

Comenzábamos el día con la directora japonesa Naomi Kawase y su vuelta a la gran pantalla compitiendo en la Sección Oficial con Vision.

Rodada en la región natal de la directora, este bucólico drama interpretado por una gran Juliette Binoche y el también conocido Masatoshi Nagase aboga por reflexionar sobre el choque de lo natural y tradicional de la cultura oriental con lo artificial y superfluo de la occidental. Con una magnífica fotografía que quiere captar la inmensa tranquilidad que se respira en la zona montañosa de Nara, el romance que desarrolla entre sus dos protagonistas es un mero trámite con el que hacer hincapié en lo que posiblemente sea lo poco que aún queda intacto de su tradición. Una historia que no acaba de cuajar del todo y que, aún siendo visualmente espectacular, el conjunto no es lo en un principio se podía esperar.

Cambiando de tercio, el siguiente turno era para la magnífica The sisters brothers de Jacques Audiard, que entraba dentro de la sección Perlas por su premio a la mejor dirección en el pasado Festival de Venecia.

Es sabido que este director ama los westerns y lo deja bien claro viendo el cuidadoso y fantástico resultado de su último trabajo. Tomando como punto de partida a dos hermanos reconvertidos en cazarecompensas (brutales actuaciones de Phoenix y Reilly), nos desarrolla una historia que desde el primer minuto hará cómplice al espectador, haciéndonos viajar en una montaña rusa de emociones y sensaciones. Pasamos desde el drama fraternal hasta la acción más violenta, todo ello con una ambientación tan espectacular como realista, donde veremos un país que está evolucionando del colonialismo más rural al nacimiento y crecimiento de las grandes ciudades. Un cambio que nuestros protagonistas quieren aceptar pero que no terminan de desarraigarse de sus tradiciones. Sensacional.

Y para comenzar la sesión de la tarde nada menos que con la producción china Ash is the purest white, dirigida por Jia Zhang-Ke que se proyectaba dentro de la sección Perlas.

La presencia del mercado chino en los festivales de cine se está haciendo cada vez más acentuada, y es que viendo películas como ésta no es de extrañar que así sea. Aún tomando como hilo principal el imposible romance de una pareja, el envoltorio que rodea esta historia en torno al cine de mafias es sencillamente sensacional. Dilatándose en el tiempo, el director aprovecha también para hacer una crítica sobre la evolución que ha sufrido el país desde el cerrado comunismo hasta uno de los mercados más prolíficos a nivel mundial, todo desde un punto de vista para ser escuchado desde el exterior. Fantástica fotografía y algunas escenas que se quedarán grabadas, redondean esta genial película que tiene ya su merecido reconocimiento.

Y para cerrar la jornada, la esperada incursión de la gran directora francesa Claire Denis en el género de la ciencia ficción con High Life, la cual estrenaba en este certamen y que se incluía dentro de la Sección oficial.

Primera película de habla inglesa que esta directora realiza, contando para ello con un reparto excepcional y siendo quizá el mayor de los atractivos para el público general. Aún así, es un trabajo con el que vuelve al cine más personal y arriesgado, firmando una historia que seguramente levantará más diferencias que unanimidad tras su visionado. Con un desarrollo lento y una duración de más de dos horas, la directora nos presenta una visión de la vida contando para ellos con diferentes factores, el principal de ellos la soledad en el inmenso espacio. Hace uso de imágenes que muchos tildarán de provocadoras, pero que para nosotros son una auténtica delicia con la que potenciar la historia y así sumergir más al espectador en ese viciado clima que nos propone. Seguramente le dedicaremos otro visionado para terminar de zanjar temas, pero puede que sea una de las claras favoritas.