Sitges 2013: Conclusiones

El festival ha pasado rapidísimo, como cada año. La diferencia está en que esta vez he encontrado que ha sido un poco inferior en cuanto a contenido se refiere, respecto de las ediciones anteriores. No se si realmente ha sido consecuencia de la falta de presupuesto, ya que ha habido muchos recortes por esta crisis que parece no terminar nunca, y que para variar, no tiene contemplaciones con la cultura (entre otras cosas). Este año se ha tenido que reestructurar un poco el festival. Se han proyectado 50 películas menos que el año pasado, y se ha acortado un día su duración.

Pero bueno, como conclusión, y sin comparar con ediciones anteriores, creo que se han podido rescatar unas cuantas películas que merecían mucho la pena. Quizá la mayoría han sido apuestas seguras que dentro de poco rodarán por el circuito comercial convencional o porque han sido realizadas por directores de renombre, pero también ha habido alguna de esas joyitas por descubrir que cada año sorprenden. No tantas como hubiese querido, pero he quedado satisfecho después de ver 50 películas en 9 días.

Por lo demás que rodea al evento, he tenido ocasión de hablar con bastante gente aficionada al cine, y sobretodo, al género fantástico, que al fin y al cabo es el que nos reúne cada año aquí. A todos ellos un saludete desde este mi humilde blog, como siempre, pero en especial a ciertas personas. 

Primero de todo a ese compi de viaje, Emilio, del que podréis seguir sus andaduras en el fanzine digital Ultratumba. He pasado con él el noventa por cierto del festival, comentando para bien o para mal todas las pelis que nos hemos tragado. Suerte que coincidimos mayormente en gustos y nos hemos peleado por pocas películas, sino la ruptura hubiese sido fulminante. Eso sí, lo hemos vivido casi siempre desde ese punto de vista situado a la izquierda. 

También citar a una pareja con la que he compartido piso, Sonia y Raúl, los cuales presentaban un corto en el nuevo evento que promovía el festival este año, el Phonetastic. Seguro que es el inicio de una gran andadura, y hay que seguir probando y probando una y otra vez, como ya dijo aquél director cuando subió a presentar su película. Eso sí, para el año que viene nos tenemos que buscar otro techo donde guarecernos, ¿eh?.

Y bueno, otro año más que volvemos a poner el reloj con la cuenta atrás para el siguiente. Quedan ahora unos cuantos días de digestión lenta, haciendo reviews de todas (o todas las que se lo merecen) películas que he ido viendo a lo largo de estos 9 días. Aún así, hoy ya estoy echando de menos el levantarme pronto para ir a pasar una jornada cinéfila con los de mi especie...