Iron Man 3

Y con esta cerramos la trilogía...¿no? 

• Título original : Iron Man 3
• Director : Shane Black
• Guión : Drew Perace, Shane Black
• Productor : Kevin Feige
• País : USA, China Año : 2013
• Compañía : Marvel, Paramount, DMG
• Intérpretes :  Robert Downey Jr, Gwyneth Paltrow, Rebecca Hall, Don Cheadle, Guy Pearce, Ben Kingsley
• Género : Acción, Ciencia Ficción

Sinopsis
Desde el suceso de Nueva York junto a los Vengadores, Tony Stark ha estado recluído en su mansión de Miami Beach, evitando ser portada de las revistas. Ahora, un terrorista llamado el Mandarín, el cual está realizando ataques sistemáticamente contra los Estados Unidos, hará que asome la cabeza de nuevo. La razón, Stark le ha desafiado y ha recibido un ataque que destruirá todo lo que tiene. Tendrá que empezar desde cero, escondido y sin recursos, para poder derrotarle y recuperar lo que le pertenece...

Tercera entrega de la franquicia en la que se han cambiado varias cosas, desde la producción, hasta la realización de la misma. Después de dirigir las dos primeras entregas, Jon Favreau deja la gorra de director y se la pasa a Shane Black. Siendo ésta su segunda película al mando del equipo, Black es más conocido como guionista en trabajos como la saga Arma Letal, El último Boyscout, El último gran héroe,... muy conocedor del cine de acción, vamos. También co-escribe el de esta película junto a Drew Pearce, productor y guionista para TV que ha entrado por la puerta grande, ya que en su nueva bolsa de trabajo se pueden incluir Pacific Rim y una posible tercera entrega de Sherlock Holmes. Todos estos cambios apuntan a un posible enchufe por parte de Downey Jr., pero bueno, para rumores ya existe el señor Google...

La película continúa tras lo sucedido en Los Vengadores (Josh Whedon, 2012), dando de nuevo conexión entre las franquicias tal y como pasara con las últimas producciones de Marvel (Thor, Capitan América,...). Ahora tenemos a un Stark mucho más estabilizado y centrado en su círculo personal, preocupado más por ellos y lo que les pueda suceder, que por si mismo. Este cambio parece llegar por una aparente moda de héroe atormentado que impuso Nolan y su excelente Dark Knight (2008), ya que no es la primera ni será la última.

Y quizá todo este conjunto ha sido el que ha fallado, ya que intentar hacer un personaje más dramático con el carácter de Tony Stark, dándole un papel más profundo y dejando de lado el humor que le caracteriza, es muy complicado. Black no ha sabido encontrar las dosis correctas para que todo el conjunto funcione, que incluso hasta para las escenas de acción, que se supone que es entendido, deja un poquito que desear. Lo mismo le pasa el guión, que también presenta alguna que otra incongruencia, ya no en aspectos de veracidad en cuanto a la tecnología se refiere, sino en el tratamiento de los elementos de que dispone. No puede hacer que el espectador se pregunte ¿por qué no lo has hecho hasta ahora?.

Aparte, y basándonos en la portabilidad del cómic a la gran pantalla, no se puede presentar al némesis de Iron Man, el Mandarín, tal y como lo ha hecho, ya que seguramente se habrá llevado más de una crítica por parte del aficionado al superhéroe. Sí que ha tenido mucho que ver la productora china con la que han contado para la inversión inicial, ya que no querían  que el enemigo fuese chino, e incluso que no fuese ni asiático, pero bajo estas condiciones se tendría que haber replanteado quizá el guión. Y no es porque Ben Kingsley lo haga mal, ya que es uno de los personajes mejor caracterizados, sino porque pierde todas sus facultades.

Y ya que estoy hablando del reparto, decir que todos los que repiten en esta tercera entrega siguen teniendo el mismo perfil, destacando siempre a Downey Jr., (aunque un poco más flojo por causas del guión) y los nuevos personajes incluídos, que se mantienen a la altura. Uno es el ya comentado Ben Kingsley, que lo borda, y el otro es Guy Pearce, el cual pasa la segunda mitad del metraje retocado digitalmente, pero que tampoco tiene desperdicio ninguno.

En cuanto al festival pirotécnico de efectos especiales, se ha reducido considerablemente respecto a la anterior entrega (aunque no era muy difícil tampoco), dejando solamente un acto final en el que se despliegan al máximo nivel. No está mal que no se abuse de los mismos a lo largo del metraje, pero tampoco se puede racanear en una película que, en cierta manera, es de ciencia ficción. Pero bueno, esto es consecuencia de lo ya explicado antes en cuanto a las malas dosis de los elementos de la película.

Así pues, a mi parecer, la trilogía ha ido decreciendo a medida que ha ido aumentando el número de entregas. Como aquella primera parte en la que creo nos sorprendió a todos, ya no solo a los fans de Iron Man, sino a cualquier aficionado al género, me parece que no volveremos a tener nada igual. Seguramente volvamos a ver a Robert Downey Jr. calzarse uno de los Mark otra vez, pero huele a que será solamente para Los Vengadores 2 (2015), ya que parece que aquí se termina una época. En fin, entretenida película, que tira más a las palomitas que ha dejar algo para el recuerdo...