Esta jornada ha sido la más extensa hasta ahora en cuanto a películas vistas pero con pocas sorpresas que puedan destacar. En cuanto a celebridades se han podido ver paseando por los jardines a Paul Scharder, del cual he visto su nueva película, Ruggero Deodato a quien le concedían la María Honorífica y a Adam Nimoy, que presentaba el documental sobre su padre en este 50 Aniversario de la serie Star Trek.
Primera película de este director que también firma como guionista, la cual para mi gusto ni aporta nada nuevo ni consigue entretener. La historia coge como referencia el aislamiento personal que muchos adolescentes sufren y lo refleja en una joven que, por esos mismos motivos, se desplaza con su madre a una nueva población para comenzar de nuevo. Se adentra en el subgénero de las posesiones, pero esta vez de forma benigna y enroscándose en un drama que no se sostiene. Aparte, su desarrollo es bastante lento y no sorprende más que con un par de sustos efectistas.
Acto seguido ha sido el turno para Museum de Keishi Otomo.
Tenía curiosidad por ver esta película ya que me atrajo la sinopsis y su comparativa hacia Seven (David Fincher, 1995). Nos relata la persecución de un asesino en serie, el cual mata a sus víctimas mediante procedimientos relacionados con algún pecado que cometen, dejando una pequeña nota para su captor. Sí que tiene ciertas características parecidas, pero es bastante más personal, añadiendo otros elementos originales. Eso sí, aunque la idea no sea mala, la película reitera demasiado en lo mismo y se extiende sin sentido alguno, haciendo que a partir de la mitad de la misma se haga bastante pesada para el espectador.
Y la siguiente ha servido para revivir el pasado de videoclub, Phantasm de Don Coscarelli.
Ésta era una copia restaurada que hace poco finalizó la productora de J.J. Abrams bajo el consentimiento de Don Coscarelli, la cual está volviendo a proyectarse en algunos cines selectos. Un lujo poder verla con esa calidad y en pantalla grande, reviviendo de nuevo uno de los grandes clásicos del cine de terror. Tras la película, el director tuvo un tiempo para contestar las dudas del público y explicarnos algún que otro chascarrillo relacionado con el rodaje de ésta y de sus secuelas.
Después ha sido el turno para la belga Mon Ange de Harry Cleven.
Esta película nos relata la historia de un niño que nace invisible y se hace amigo de una niña que es ciega. Esta combinación tan alegórica es la que da forma al guión, contrastando ambos problemas y viéndoles crecer juntos, hasta que llegan a la madurez. Todo este camino recorrido se hace con un aroma a cuento de hadas y sensiblería que no me ha llegado a gustar del todo. La idea es muy original y tiene cositas que están bien, pero no he terminado de entrar del todo.
Y para variar un poco he ido a ver una película que se incluía dentro de la retrospectiva al cine soviético de ciencia ficción, In the Dust of the Stars de Gottfried Kolditz.
Película rodada en 1976, la cual tiene una ambientación tan estridente como simpática. Se nota muchísimo la influencia de la era Disco que por aquellos años estaba en pleno apogeo, tanto musicalmente como en los vestuarios. Se nota la falta de presupuesto hizo que la imaginación se desbordara, viendo una serie de artefactos que quizá en su época llamaran la atención, pero que ahora rozan el ridículo. Bastante curiosa de ver.
Y la que más ha destacado del día ha sido Invierno de Jonás Cuarón.
No es su primer trabajo, pero sí quizá el que más repercusión le ha dado al joven Cuarón. Tras la básica idea de seguir un un pequeño grupo de inmigrantes ilegales que quieren cruzar la frontera de México a Estados Unidos, se desata un quasi survival que me ha sorprendido para bien. Aún estando rodada en el desierto, la atmósfera opresiva que consigue está muy bien lograda, sintiendo en cada momento la presión del cazador. Muy entretenida sin grandes aspavientos.
Y para acabar el día lo último de Paul Schrader, Dog eat Dog.
No es una gran película pero tampoco merece ser arrojada al pasto de las llamas como he escuchado por ahí. Es una ida de castaña que parece haber sido rodada tras una fiesta de colegas, los cuales se han reunido para contarse historietas. Nos cuenta la historia de tres ex-convictos que se reúnen para volver de nuevo a las andadas. Los exagerados papeles interpretados son lo más llamativo, dándole un sobresaliente al siempre genial William Dafoe. No es uno de los mejores trabajos de este director pero yo la he disfrutado bastante.
Reviews en siguientes entradas.
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