Sitges 2016 ~ Día 1

Otro año más arranca una nueva edición del Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, la 49ª, y viene cargada de suculentos títulos para que el aficionado al cine de género pueda devorar sin compasión alguna. Eso sí, desde hace semanas ya se puso la olla a hervir para que, como cada año, el ritual previo al inicio del festival comenzara a cocinarse lentamente. Visionado de tráilers, selección de las películas preferidas o por las que tenemos curiosidad, cuadrar horarios, ... todo ello para poder sacarle el máximo partido al festival de referencia del fantástico por excelencia.

Así pues, para comenzar la primera jornada, que menos que ver la película que inauguraba este año el festival, Inside de Miguel Ángel Vivas.

Es una adaptación de la francesa A l'interieur (2007), aquella en la que Bustillo y Maury nos sorprendían con su ópera prima, volviendo a lo que años antes se denominó como el nuevo cine de terror francés. Bajo mi punto de vista, un remake totalmente innecesario dada la cercanía de la original, ya que no aporta nada más que el ser pasada por un filtro para poderse proyectar en el circuito comercial habitual. Todos los elementos que sacudían al espectador en su butaca se han eliminado, dejando como resultado un thriller muy ligero y casi sin atmósfera, lo cual la convierte en un producto pasable pero no imprescindible.

La siguiente en el programa fue la española (aunque hablada en inglés) Proyecto Lázaro de Mateo Gil.

Sin ningún tipo de pretensión, esta película me sorprendió por la forma en que trata un tema que bien podía estar a la orden del día, el querer más longevidad. Motivado por el diagnóstico de una enfermedad terminal, el joven protagonista decide que hibernen su cuerpo para que en un futuro próximo, cuando la tecnología haya avanzado, sea descongelado y puedan curarle. El dilema que plantea entre lo ético, religioso y moral, es la base del desarrollo de esta película, que añadiendo su buena realización han hecho que me agradase en buena medida.

Acto seguido he podido ver una de las que estaba esperando con más ganas, la vitoreada Train to Busan de Yeon Sang-Ho.

Esta película es realmente un espectáculo sin precedentes. Las buenas críticas con las que venía desde el este asiático se confirmaron y no defraudó. Volvemos al cine de infectados, donde la historia se centra en un pequeño grupo de personas que se encuentran (casi) a salvo en un tren que va dirección a Busan. Prácticamente casi toda la película se desarrolla en su interior, con lo que la sensación de acoso es mucho mayor. Lo mejor es que, como en la mayoría de películas coreanas, no se centra solamente en infectar-perseguir-morir, sino que trabaja tan bien los personajes que hacen cómplice al espectador. Una genialidad que a pesar de sus más de dos horas de duración se pasan volando de lo que llega a entretener.

Y la primera rareza del festival que vi fue la polaca The Lure de Agnieszka Smoczynska.

Realmente no sabía que iba a ver, mas que la corta sinopsis que leí en el programa de mano y que se trataba de un musical un tanto bizarro. Nos cuenta la historia de como un pequeño grupo de actores de variedades introducen en su equipo a dos sirenas, las cuales triunfan cada noche cuando se suben al escenario; pero no todo es bonito y, como siempre, cuando se interpone el amor de por medio las cosas se ven de diferente manera... Aunque la primera parte de la película sea curiosa y divertida, el tramo final decae bastante y se enrosca en una espiral de la cual se sospecha fácilmente como va a salir. Pasable aunque fácilmente olvidable.

Y para seguir el día otra producción coreana, la cual también traía buenas referencias con ella, The Tiger de Park Hoon-jung.

Situada a principios del siglo XX cuando Corea estaba ocupada por los japonenes, vivimos la historia de un cazador que habita las montañas con su joven hijo. Intentando mantenerse alejados todo lo posible de la milicia japonesa, al final la situación provocada por un alto mando y su obsesión con cazar al mayor tigre que vive en la zona le hace sucumbir sin opción alguna. Es lenta pero atrapa al espectador con su estilo narrativo y el desarrollo cuasi perfecto de los personajes, así como las increíbles imágenes de los escenarios donde sucede. Una película que va in crescendo hasta su desenlace, metiéndonos cada vez más en la misma.

Y para terminar la jornada la francesa Dans la forêt de Gilles Marchand.

Bastante lenta y con una historia que no me ha llamado la atención, no he conseguido entrar en ningún momento en ella. No hay que desmerecer el trabajo que hace el actor que interpreta al más joven de los hermanos, pero para mi gusto el cómputo global no se sostiene. Acaba rozando un poco el fantástico pero aún así no atrapa.

Reviews en siguientes entradas.